La yuca, maniot o mandioca es un tubérculo similar a la patata muy utilizado en la cocina latinoamericana.
La yuca, también conocida como maniot o mandioca, es el tubérculo obtenido de los arbustos tropicales del mismo nombre.
Presenta una carne de color blanco que se encuentra recubierta por una corteza de color pardo oscuro. A partir de la yuca se obtiene la tapioca (fécula) y una harina que, al igual que el propio tubérculo, también se conoce como maniot o mandioca.
La yuca es originaria de Brasil, donde era utilizada por los indígenas casi como alimento exclusivo. Algunos autores también mencionan Venezuela y América Central como su lugar de origen.
Lo que sí es cierto es que su cultivo se remonta hasta 3.000 o 2.500 a.C., aproximadamente.
Consejos a la hora de comprar yuca:
A la hora de comprar yuca en el mercado, es importante comprobar que la textura se encuentra intacta, sin golpes y firma al tacto, sin partes blandas ni viscosas.
Siempre se deben elegir aquellos ejemplares que menos dañados se encuentren, ya que de este modo se asegura una conservación más duradera en el hogar.
También hay que fijarse en el color y en el olor, rechazando los ejemplares que desprendan un olor fuerte y desagradable y los que presenten una coloración anómala, ya que esto puede indicar cierto grado de deterioro o envejecimiento.
Cómo conservar la yuca:
Una vez en el hogar, conviene consumir la yuca lo antes posible, pues cuanto mayor sea su grado de frescura, mejores serán sus propiedades nutritivas.
En caso de que su consumo no se realice inmediatamente, este tubérculo se debe mantener en el frigorífico hasta el momento de su utilización, ya que tanto un elevado grado de humedad como una temperatura moderada provocan rápidamente alteraciones en su estructura y composición.
En ocasiones, para conservarlo durante periodos de tiempo superiores, se puede congelar, una vez pelado y troceado.
Uso de la yuca en la cocina:
La yuca tiene un sabor parecido a la patata, por lo que se suele consumir de la misma manera. Se puede servir frita, cocida, asada o estofada, aunque principalmente se utiliza para obtener harina de yuca y tapioca.
La yuca es una de las fuentes más importantes de alimentación en los trópicos, donde habitualmente se consume pelada, hervida y machacada. Sin embargo, en ocasiones también se prepara asada, frita o en forma de puré.
Además, la yuca fermentada se utiliza para elaborar bebidas alcohólicas.