Alimentación saludable con bajo presupuesto

¡Cuidado! No gastes de más y aliméntate sanamente.

Que la falta de dinero no te quite la intención de comer bien. Comer bien se adapta a cualquier presupuesto, lo único que se necesita es tener la planificación adecuada y aprovechar una serie de consejos que te permitirán invertir mejor tu dinero.

Una alimentación saludable no tiene por qué golpear tu bolsillo. El secreto está en basarse en la variedad de nutrientes y la moderación, por ese motivo es necesario que la estrategia para cuidar tu presupuesto incluya desde las compras al supermercado, hasta planear el menú de la semana.

La Academia de Nutrición y Dietistas de Estados Unidos estableció algunos pasos a seguir que usted puede tomar en cuenta

Planificación previa

El primer paso es definir el presupuesto que se tiene disponible para nuestra alimentación y definir el lapso que este dinero debe alcanzar.

Seguido se debe preparar un menú variado para toda la semana, la ingesta de alimentos y bebidas de forma balanceada permite un adecuado control del peso, además la Academia de Nutrición y Dietistas recomienda incluir en el menú semanal las meriendas que se consumirán cada día.

“De esa forma evitamos comer en exceso y gastar de más cuando el hambre nos ataca fuera de los horarios tradicionales de alimentación y al mismo tiempo nos da la opción de consumir comida saludable y preparada en nuestro propio hogar”, indican diversos expertos.

El planear un menú semanal, quincenal o hasta mensual, te permitirá comprar de manera planificada y evitar esas compras rápidas a establecimientos donde los precios son mayores y hasta podrás aprovechar ofertas de productos si los compras en mayor volumen.

Compra frutas y verduras en el mercado local, estarás ahorrando dinero y apoyando la agricultura de la zona. Quizás hasta aprenderás de nuevos alimentos y cómo prepararlos gracias a los buenos consejos de los productores.

Compras en el supermercado

Antes de salir de compras debes comer hasta sentirse satisfecho. Comprar con el estómago vacío puede llevarte a adquirir alimentos en exceso. Ir de compras con hambre nos hará ver la comida mucho más apetitosa, por eso es recomendable comer al menos 30 minutos antes de llegar al supermercado.

Prepara una lista de compras que incluya todos los tipos de alimentos considerando que no hay alimentos buenos o malos, solo dietas mal balanceadas. Luego, con tu lista en mano irá más tranquilo por los pasillos.

Especialistas aseguran que “en el supermercado podemos aprovechar para analizar las opciones que más nos convienen, además cuando lleguemos debemos tratar de estacionar el carro lo más lejos posible de la entrada, de esa forma también nos ejercitamos y prevenimos la obesidad”.

Busca las frutas y verduras de temporada, así sabrás que están más frescos y su precio será mucho más barato y tendrás variedad para poder seleccionar los mejores.

En el trabajo y fuera de casa

La mejor posibilidad para comer fuera de nuestra casa, saludablemente y ajustándose a un presupuesto limitado, es preparando nuestra comida de forma balanceada y llevarla con nosotros, de esa forma evitará gastos adicionales.

La Academia de Nutrición y Dietistas recomienda comenzar una competencia con los compañeros de trabajo, el ganador será la persona que coma de forma más saludable incluyendo todos los tipos de alimentos y bajo el mismo presupuesto.